jueves, 14 de enero de 2016

Una buena clase

Hola a todos.
Tras leer las últimas aportaciones de los compañeros acerca de la actividad propuesta por David en este blog en relación a la complejidad de determinadas perspectivas sobre lo que entendemos por “una buena clase”, he decidido aportar mis ideas al respecto. Puesto que ya se ha escrito mucho sobre el tema, voy a intentar darle un enfoque ser breve, confiando en que mi enfoque añada información relevante al caso. Para ello me he basado con las fases de evolución de los estudiantes y profesores de Perry (1979) y Kegan (1994), por lo que he categorizado a los alumnos en cada una de estas etapas, determinando así indirectamente su nivel de complejidad.
DUALISMO
Alumno 1: Las palabras de este alumno me hacen inferir que se encuentra en el primer nivel de este continuo, pues concibe el aprendizaje como un proceso de transmisión de información del docente al estudiante, y que además esta información es verídica de por sí y no ha lugar a debate alguno. El saber proviene de fuera. Se aprecia que se siente cómodo con la idea de que hay una única solución para cada problema.
Alumno 5: Este estudiante asume que el profesor está en posesión de la verdad y que ésta le es transmitida a los alumnos sin que puedan cuestionarla. Se encontraría en el nivel 1, pues no acepta que puedan existir respuestas alternativas. Su estilo retórico es simplista.
MULTIPLICIDAD
Alumno 8: Aquí, estimo que el individuo se encuentra en una fase a caballo entre el dualismo y la multiplicidad. Comienza a tener en cuenta el valor de las preguntas abiertas y la participación en el proceso de enseñanza-aprendizaje y que éste no es sólo una mera transmisión de información.
Alumno 2: Este joven se encuentra ya en un punto en que entiende que las opiniones son relevantes a la hora de responder a una cuestión. Acepta la existencia de diferentes puntos de vista sobre una misma materia y se siente cómodo con las preguntas abiertas. En su descripción, afirma que se esfuerza en buscar evidencias por sí mismo en lugar de acatar sin más lo que el profesor dice.
Alumno 7: Por lo que se aprecia en el fragmento, el sujeto que lo suscribe se encuentra en una fase en la que comienza a indagar por sí mismo en lugar de depender por completo de la figura de autoridad. Entiende el aprendizaje como un proceso más activo y el conocimiento como algo acerca de lo cual siempre podemos investigar más.
RELATIVISMO
Alumno 3: Establece que los valores y el conocimiento dependen de una perspectiva individual, infravalorando aquello que procede de fuentes externas. Además, demuestra un compromiso con un curso de acción propio, lo que evidencia que podría estar en el nivel 6.
Alumno 4: En este caso, el sujeto confiere especial importancia al contexto y a las perspectivas individuales en el conocimiento, desdeñando el papel que la autoridad externa posee en el proceso a favor de una evaluación crítica y personal. Habla, de hecho, directamente de relativismo.
COMPROMISO CON EL RELATIVISMO
Alumno 9: Aquí, pese a su redacción informal, el alumno se muestra comprometido con su ideología personal. Manifiesta un carácter crítico e intenta resolver los conflictos, aunque es consciente de que éstos puede que no se lleguen a solucionar del todo.

Alumno 6: Se trata de un alumno expresando conscientemente su razonamiento. Defiende el compromiso con los valores personales y es capaz de evaluar y reflexionar de forma crítica acerca de las consecuencias de sus decisiones. Admite, además, que existen diferentes opiniones que pueden ser irreconciliables.   

3 comentarios:

  1. Qué interesante tu aportación, Marina... visto de la forma que lo presentas tú tiene bastante sentido y de hecho, se entiende fácilmente. Creo que usar las fases de Perry y Kegan (que se comentaron en la última clase brevemente) ha sido una manera efectiva de categorizar a los alumnos ejemplo. Definitivamente tu enfoque añade información relevante -al menos para mí- y aun difiriendo en algunos detalles, tus razonamientos me han aportado una perspectiva diferente que me hace mirar las cosas de forma distinta, y que creo que enriquece la información y la visión que yo tenía.
    A nivel personal, me siento identificada (sobre todo desde el punto de vista de la "Ángeles-alumna") con la fase de relativismo.
    Me preguntaba dónde te posicionarías tú... con qué te sientes más identificada, ya sea como alumna, como docente o en definitiva, en base a tu entendimiento sobre la enseñanza y el aprendizaje.

    Muy interesante tu aportación.
    Un saludo

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  2. Gracias, Ángeles. Me alegro de que te haya parecido interesante.
    La verdad es que no me había planteado en qué fase me encontraría yo. No me parece una cuestión baladí y creo que reflexionaré sobre ello.
    Un saludo.

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  3. A mí también me ha parecido muy interesante tu aportación, Marina. Yo, decidí ordenarlos considerando otros aspectos, pero me parece más acertado hacerlo basándonos en las fases de evolución según el planteamiento de Perry y Kegan, parece que tiene mayor sentido, sobre todo a la hora de posicionar ciertos comentarios.
    Un saludo.

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